Atendiendo varias inquietudes planteadas por agricultores de la provincia, el Gobierno provincial de Santo Domingo de los Tsáchilas empezó acciones con el propósito de buscar mecanismos que permitan controlar la creciente proliferación del caracol Africano, plaga que en los últimos meses muestra un preocupante repunte que empieza a causar molestias en los cultivos y agricultores.
Con esta finalidad, la mañana del miércoles 22 de julio, en la Prefectura se llevó a cabo una reunión con los representantes del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP), Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP) y de la Agencia de Aseguramiento de la Calidad del Agro (Agrocalidad).
El objetivo fue cruzar información y unir esfuerzos que permitan actuar frente a este caso y dar tranquilidad a los agricultores de la provincia. Para ello, técnicos del GAD Provincial, Agrocalidad y MAGAP se encargarán de la difusión sobre la manera en que se puede controlar la plaga teniendo como base la experiencia de la Agencia de Control en procesos anteriores sobre este mismo mal, mientras que el INIAP facilitará las investigaciones realizadas por esta entidad sobre la presencia de los caracoles.
El próximo martes 28 de julio de 09:00 a 12:00 todos los técnicos serán capacitados por un especialista con estudios logrados internacionalmente en el tema, de tal manera que tengan la suficiente solvencia de conocimientos para que puedan multiplicar el mensaje sobre las formas naturales y el uso de productos químicos que se puedan emplear para eliminarlos.
Para Jorge Tapia, director de Desarrollo Económico del Gobierno Provincial, si bien es cierto hasta el momento no existe una gran problemática causada por el mal, es necesario estar prevenidos de caras a la presencia del fenómeno de El Niño, puesto que las condiciones de humedad que tiene nuestra provincia se presentan como óptimas para la proliferación de los gasterópodos, lo que hace necesario trabajar en las medidas preventivas antes que pueda existir un brote de gran magnitud que ponga en peligro la variada producción agrícola que poseemos.
De ser necesario el Gobierno Provincial podría adquirir insumos para su distribución destinada al combate del azote, que además se presenta con la preocupación de la existencia de estudios que determinan que estos caracoles son transmisores de una bacteria que produce la meningitis, la cual a través de cadenas bien podría llegar al ser humano.
Por ahora, el inicio de las intervenciones en territorio están destinadas al levantamiento de información primaria que determine si su presencia está causando daños y pérdidas en los cultivos, y si existe, conocer el grado de afectación en siembras propensas al ataque, para de acuerdo a la necesidad intensificar las acciones de erradicación.