Aclarando que la Prefectura no tiene competencia alguna en instalar radares, fotorrojos o contadores en ninguna vía de nuestra provincia, y menos, en el tramo de delegado de la vía Alóag-Santo Domingo, la Prefecta Johana Núñez, se pronunció sobre este tema, indicando que se han dado 5 días de plazo para que la Empresa Pública Municipal de Transporte de Santo Domingo los retire de manera inmediata.
En rueda de prensa, ofrecida este jueves 26 de septiembre, y acompañada del Viceprefecto Carlos Landaheta, el asesor jurídico del Gobierno Provincial, William López, y representantes del transporte, la autoridad indicó que desde marzo de este año se han emitido oficios a esta entidad, para que se retiren los dispositivos ubicados en el tramo KFC-Sueños de Bolívar, haciendo caso omiso a este requerimiento.
“Que quede claro. La Prefectura no tiene competencias en materia de tránsito, por lo tanto no puede instalar radares, puntos rojos u otros dispositivos similares”, recalcó la Prefecta, precisando que los que se encuentran en la vía a Quito, son de exclusiva responsabilidad de la Empresa Pública Municipal de Transporte, que de manera arbitraria los instaló sin ninguna autorización.
Hugo Veloz, presidente de la Asociación de Profesionales del Volante de Santo Domingo de los Tsáchilas, dijo que las multas generadas a través de estos dispositivos electrónicos han venido perjudicando de manera drástica, no solo al gremio del transporte, sino a la ciudadanía en general de Santo Domingo y el país entero.
El presidente de la Cámara de Transporte Pesado de la provincia, Galo Angulo, dijo que este era un problema que estaban teniendo a nivel nacional, con los diferentes municipios, porque estos aparatos electrónicos se han convertido en la “gallinita de los huevos de oro”, por lo que pidió a todos unirse, tanto lo público como lo privado, para evitar más arbitrariedades.
Por su parte el Viceprefecto dijo que los radares deberían ser medidas educativas, preventivas, más no una herramienta de negocio privado, tomando en cuenta que estos no benefician a la comunidad, y que siempre termina perjudicada.